16 de abril de 2009

San Bartolomé de Ucero. El ombligo templario


San Bartolomé de Ucero.

Cada vez que tengo que aproximarme a los Templarios, me encuentro con lo mismo. Mucha de la bibliografía popular es un compendio de análisis delirante de simbología barata. También es cierto que hoy en día vivimos una carencia que muchos snob llenan de todas estas cosas, con lo sencillo que es acercarse a cualquier congregación religiosa y solucionarla -la carencia me refiero-. En definitiva, si realmente hubo en algún momento algún mensaje oculto en la arquitectura Templaria -que habrá que ver en cada caso si lo es-, queda absolutamente empañado por las aclaraciones retorcidas que se intentan transmitir.

Una vez dicho esto podría parecer que el análisis de la simbología templaria que existe en San Bartolomé de Ucero discurre por los mismos caminos, y es cierto, al final la línea es muy fina y lo que está claro es que creemos conocer cierto código de comunicación, pero aquello que nos intenta transmitir , en general, no estamos preparados para aprehenderlo.

Vaya por delante que no existe documentación fehaciente que permita atribuir la ermita de San Bartolomé a la orden del temple, en alguna ocasión se habla de San Juan de Otero, pero como su nombre indica debió estar en algún lugar elevado y esta no lo está. Probablemente se hace referencia a unas ruinas que se ubican junto al castillo de Ucero. Y dicho esto comenzamos.

Ya hablamos de Templarios en la entrada dedicada a Santa María de Eunate, y efectivamente existen muchas coincidencias entre ambas. La primera de ellas refererida a los lugares elegidos para la construcción de los templos, reutilización, piedra sobre piedra de lugares mucho mas antiguos. Concretamente San Bartolomé de Ucero se eleva sobre lo que parece un antiguo altar natural de la Edad del bronce y junto a una cueva -con todo lo que ello significa-. Y geográficamente sobre los ejes que en su momento pusiera de relavancia Juán García Atienza - aunque él hablaba de Fisterra-, ejes que dividen la Península Ibérica en cuatro partes, ejes que parten desde el Cabo de Creus hasta Touriñan -De Oriente a Occidente- y que sobre su mediatríz se erige San Bartolo -Es decir, se encuentra a la misma distancia del Cabo de Creus, que del de Touriñan con un error de no mas de 100 metros-.


Ver SAN BARTOLO en un mapa más grande

Pero dejando posibles casualidades en cuarentena, lo que si podemos es intentar relacionar San Bartolomé de Ucero con los templarios, y para ello comenzamos nuestra andadura en el Castillo de Chinon(Francia) donde el gran maestre del Temple, Jacques de Molay, acompañado de 138 caballeros de la orden fueron detenidos por orden de Felipe el Hermoso, rey de Francia, un dia -viernes 13- de octubre de 1307.

Esta comunidad de monjes y guerreros, con extensas posesiones cuajadas de fortalezas, tierras y monasterios por toda la cristiandad -Europa y Tierra Santa- y habitualmente los banqueros más fiables del Medievo, fueron despojados de sus posesiones, ultrajados, torturados y finalmente ejecutados con la complicidad del Papa Clemente V.


Ejecución en la hoguera.



Molay y los suyos, sorprendidos con engaño cuando regresaban de los funerales de la condesa de Valois, pasarían casi siete años en prisión antes de ser quemados en la hoguera. La Torre del Homenaje en el castillo de Chinon, fue la prisión de Molay y el escenario del proceso judicial de la infamia. En Chinon,mientras los templarios aguardaban inútilmente a que el Papa de Aviñón les salvara de las acusaciones formuladas por el rey de Francia, dejaron en las paredes de su mazmorra unas extrañas y a la vez sorprendentes inscripciones, conocidas como los "grafiti de Chinon", donde aparece buena parte de la simbología templaria.


Graffitis Templarios en Chinon.



Y este es nuestro punto de partida, analizando los graffitis me encuentro en primera instancia con la imagen central del corazón. Es evidente, o al menos prácticamente indiscutible que en la mente del grabador estaba el corazón de Jesús. Corazón que se repite hasta en 10 ocasiones en el rosetón románico que mira hacia el sur en el crucero. ¿Corazón únicamente Cristiano?, parece que la ejecución de la celosía calada es de origen musulmán. Y la mejor referencia para hablar de ello es Ibn al'Arabí (1165-1240) natural de Murcia.


El corazón en Ibn'Arabí, como en el sufismo en general, es el órgano mediante el cual se produce el verdadero conocimiento, la intuición comprehensiva, la gnosis de Dios y de los misterios divinos, en resumen, el órgano de todo lo que puede abarcarse con la denominación de ciencia de lo esotérico.

Henry Corbin.
La imaginación creadora en el sufismo de Ibn Arabi.


Después de esto algún lector no avisado se preguntará, ¿Como es eso? ¿Los Templarios bebiendo de fuentes Islámicas?. Pues si, bebiendo, comiendo y celebrando sus orígenes.

Sufi. Derviche.



Canecillo. San Bartolomé de Ucero.


Ningún historiador decente se atreve ya a maltratar la hipótesis, en realidad muy antigua, de que los templarios y los hashishin abrevaban en un hontanar común, imitando mas bien aquellos a estos que viceversa, por contundente determinismo cronológico. Todavía cabe menos discutir la evidencia de que las órdenes de caballería se calcaron sobre la falsilla de los ribat musulmanes (de donde rábida) o monasterios fortificados en los que una gavilla de hombres de honor se las arreglaba para practicar simultáneamente la mística y el ejercicio de las armas.

................

Asesinos y templarios, como diría el anciano, serían dos caras de la misma moneda.
F.Sánchez Dragó. Gárgoris y Habídis.


Corazones y pentáculo.



Sobre la figura esculpida de los diez corazones se nos aparece simultáneamente el pentáculo y si seguimos entonces buscando elementos en común, y nos encontramos un alquerque, si un juego de las tres en raya. La cuestión es que en vez de aparecer -como sería de sentido común- sobre una superficie horizontal aparece sobre una pared tanto en Chinón como en San Bartolomé, además los templarios tenían vedados los juegos, ¿Explicaciones?, en realidad no sería tal juego si no una forma geométrica que da cabida a la divinidad, esquema sobre el cual debieran encajar las representaciones de lo divino, en este caso la imagen de Jesús.


Alquerque en San Bartolomé.



Y para ligar todo ello nos retrotraemos a los trabajos de Villard de Honnecourt, arquitecto de la primera mitad del Siglo XIII del que nos ha llegado su cuaderno de trabajo repleto de anotaciones, gráficos, y comentarios que nos dan algo mas de luz de la profesión de Arquitecto en el medievo. Y a lo que vamos, en dicho libro se incluyen las dos siguientes láminas en las que si algo se puede entrever, es la necesidad de ajustar la representación de diferentes iconos religiosos a figuras geométricas concretas. En el caso que nos ocupa, el pentáculo y algo parecido al alquerque. Elementos que por su estructura geométrica (número áureo en el primer caso), parecían adecuados a ojos del artista de contener aquellas representaciones de lo sobrenatural.


Villard de Honnecourt. ¿Alquerque?


Villard de Honnecourt. Pentáculo



Se podría continuar durante horas hablando de San Bartolomé de Ucero, pero caeríamos en la tentación de ,quizá, dar explicaciones a lo que no lo tiene. Un buen camino para empezar a entender toda esta simbología es el libro de D.Ángel Almazán. Esoterismo Templario.
Lo de aquí, simplemente jugar al dominó una tarde de domingo...


San Bartolomé desde la cueva.



Próxima Entrega. Stonehenge en Valladolid. El Casetón de la Era

5 de abril de 2009

El desierto de Bolarque. La puerta al Interior


Safe Creative #0905113602571




Desierto de Bolarque y su Convento.

La Ilustración Española y Americana (1884).


1
¿Adónde te escondiste,
Amado, y me dexaste con gemido?
Como el ciervo huyste
aviéndome herido;
salí tras ti clamando y eras ydo.

2
Pastores, los que fuerdes
allá por las majadas al otero,
si por ventura vierdes
aquél que yo mas quiero,
dezidle que adolezco, peno y muero

3
Buscando mis amores
yré por esos montes y riberas;
ni cogeré las flores,
ni temeré las fieras,
y passaré los fuertes y fronteras

4
!O bosques y espesuras
plantadas por la mano del Amado!,
¡o prado de verduras
de flores esmaltado!,
dezid si por vosotros a passado.

5
Mil gracias derramando
pasó por estos sotos con presura;
y, yéndolos mirando,
con sola su figura
vestidos los dexó de hermosura.

.......

San Juán de La Cruz. Cántico


Independientemente de creencias, parece cierto que el ser humano encuentra ciertos lugares donde es capaz de llegar a lo mas profundo de si mismo. Son lugares especiales, que sin saber por qué -desde un punto de vista racional- encontramos una puerta al interior de nosotros mismos.

El asunto se repite una y otra vez a lo largo de la Historia. Monumentos en distintas épocas, erigidos a gloria de distintas divinidades, y que con un objetivo común, servir de acceso a ese fondo espiritual, que en mayor o menor medida a través de nuestras sensibilidades permite hacerse patente.

Eso sucede con el Desierto del Bolarque, no es necesario hacer largos viajes para encontrar ese camino, al final todo queda mas cerca de lo que nos pueda parecer. En este caso a unos 150km de Madrid. Ya hablábamos de este lugar en la entrada dedicada a la "Recópolis de Buendía", ya que desde lo alto de la Sierra de Enmedio(Buendía) hay una muy buena vista de lo que es el Desierto de Bolarque y sus construcciones.


Vista desde la Sierra de Enmedio (Buendía)



Aunque el eremitismo no es un caso aislado en la zona, El Desierto es la manifestación con mas esplendor del mismo hasta un punto en el que llegó a perder su propia esencia. Posiblemente al visitarlo hoy en día volvemos a sentir el abrazo de la soledad y de la naturaleza exuberante.

El Carmelo no encontró oportunidad en España hasta el siglo XVI -por alguna razón el esoterismo causaba urticaria, porque es eso al final,¿No?-. Esta orden surgida en el siglo XII cuando un grupo de ermitaños siguiendo a San Bartolo se retiraron al monte Carmelo en Palestina para llevar una vida dedicada a la contemplación , meditación y vivencia de las Sagradas Escrituras. Toda esta idea no era nueva, ya que lo que intentaban era recorrer los pasos ya marcados por Elías casi dos milenios antes. - Solo como curiosidad, Elías protagoniza -según algunos- una de las primeras apariciones escritas del fenómeno OVNI-.


Obra de D. Fray Diego de Jesús María
dedicada a los Desiertos Carmelitas (1651)


Bueno, pues en esas estamos hasta que en este momento aparece Teresa de Jesús, que protagoniza una gran revolución no solamente en la forma de entender la religión sino también el mundo. Y de todo esto viene la fundación de ,inicialmente, eremitorios en lugares apartados que permitían emular la vida de aquello santos eremitas que habitaron siglos atrás en Palestina, en regiones desérticas junto al Jordán. En definitiva lugares singulares donde poner en práctica la reforma carmelita.

La fundación es fiel a las ideas que lo impulsan. Un lugar sencillo que a lo largo de los siglos crece y aumenta en su construcción constando finalmente de un edificio central con capilla, biblioteca y estancias para los monjes, además de numerosas capillas que lo rodeaban. En cada una de ellas habitaba un mitaño sufragado por alguna familia aristocrática, que de alguna manera intentaba con esto comprar su pasaje de primera clase al mas allá.


Plano del Desierto de Bolarque (1838)


Y así continuó la vida en hasta que fue definitivamente abandonado en el siglo XIX, llegando hasta nosotros un lugar realmente atractivo y evocador. La naturaleza poco a poco recuperando sus posiciones, convirtiendo el camino de los monjes en un viaje, si no iniciático, sugestivo, que transmite como aromas imperceptibles las sensaciones que aquellos eremitas pudieron experimentar.


Caminando por la senda de los monjes.





Esta situado un emplazamiento realmente recóndito, imaginémonos a la soldadesca francesa buscándolo sin descanso para saquearlo -tal y como hicieron en todo aquello que se les puso por delante- , para finalmente darlo por perdido. Hoy en día es aún , si cabe, mas complicado ya que desde la construcción de la presa el nivel de las aguas ha subido unos metros dejando sumergido parcialmente el camino, e incluso alguno de los eremitorios.


La presa de Bolarque.

Una vez allí, es conveniente pasar el día paseando y descubriendo la zona, las pequeñas ermitas distribuidas entre la maleza, el edificio principal con las bóvedas aún en pie, y accesos subterráneos -muy peligrosos- a bodegas y la cripta de la capilla.


Restos de Bóveda Capilla Edificio Principal.

Fachada edificio principal.

Cripta de Edificio Principal.


En la actualidad es una propiedad privada (De los Excelentísimos Señores Duques de Pastrana) por lo que es necesario pedir permiso en la finca de la Pinada y comenzar el camino que parte desde allí. -Si algún lector necesita mas información le proporcionaré encantado las indicaciones necesarias-.


Localización mapa.

Vista aérea (SIGPAC)


Además como estupenda referencia existe un libro de ediciones AACHE -El Desierto de Bolarque- que por una parte me ha servido como fuente de información y por otra amplía notablemente todo lo aquí reseñado.





Próxima Entrega. San Bartolomé de Ucero. El ombligo Templario